Marina Rubio, facilitadora en la etapa de infantil.
Entre los meses de noviembre y diciembre el equipo de Senbazuru realizó dos sesiones de trabajo con el objetivo de poner en común qué entendemos por diversidad en nuestra escuela y ponerle luz a nuestras potencialidades y fortalezas como comunidad educativa para atender dicha diversidad, así como a nuestras debilidades y amenazas.
Partimos de la certeza, basada en nuestra experiencia y reflexión, de que cada niña y niño es una persona única e irrepetible y, por tanto, tiene su propia forma de ser, de pensar, de sentir, de aprender, de relacionarse, en definitiva, de crecer y desarrollarse. En este sentido, nuestra manera de entender la diversidad incluye todas aquellas características físicas, psíquicas, sexuales, cognitivas, culturales, sociales, espirituales, étnicas o cualquier otra característica que conforman la vida de cada una y cada uno.
Queremos que cada niño y niña experimente Senbazuru como un lugar donde crecer en responsabilidad y autonomía, en bienestar emocional y social, un lugar donde desarrollarse como persona y descubrir sus potencialidades, cualidades y talentos. Algunos niños y niñas necesitarán apoyos específicos, más centrados en su forma de ser, hacer y aprender porque entendemos que no hay nada más injusto que tratar igual a quién no es igual. Tenemos la convicción de que la inclusión requiere dar a cada cual lo que necesita, y en este sentido, ofrecemos posibilidades reales de desarrollo a todas las niñas y niños que forman parte de nuestra comunidad educativa.
La diversidad es en Senbazuru un factor de enriquecimiento comunitario, grupal y personal que conlleva enriquecimiento y también dificultades, retos y complejidades. Nos incita a toda la comunidad educativa (niñas, familias, profesorado) a poner en marcha el desarrollo de nuevas habilidades y recursos, y a poner a disposición de la comunidad nuestras cualidades y talentos personales para aprender a relacionarnos en un contexto escolar altamente diverso.
Las características propias de nuestra filosofía y metodología pedagógica como Agile Learning Center nos acercan de partida a nuestro objetivo como escuela diversa: el desarrollo integral de todas las personas en un ambiente escolar de respeto, de confianza, de cuidado, de participación activa, de convivencia, de responsabilidad personal y social.
Para finalizar, compartimos los objetivos generales de nuestro Plan de Atención a la Diversidad:
- Aumentar la participación de todas las personas: asegurar que sea real esa participación, es decir, que la diversidad sea agente activo en la comunidad.
- Desarrollar estrategias que permitan que todo el mundo se sienta valorado por igual
- Generar un sentido de comunidad de la que todas las personas nos sintamos parte
- Facilitar el aprendizaje
- Favorecer las relaciones interpersonales
- Fomentar valores inclusivos (niñas y niños, familias, equipo, pueblo, mundo).